¡Es liviana, suavemente dulce y super fácil de hacer!
Esta cremita un postre sin gluten, lácteos y puede ser sin azúcar cuando lo haces con azúcar de coco.
Me encanta hacerla en mini bowls, para tener una porción justa para sacar las ganas de algo dulce, que pueden atacar cuando llega la hora del postre.
Ingredientes
- 1 taza de leche de coco
- 3 cucharadas de azúcar orgánica o azúcar de coco
- 1/4 cucharita de sal marina
- 2 cucharadas de maizena
- 3/4 taza de leche vegetal
- 1 cucharada de esencia de vainilla
Instrucciones
1- Combina 1/2 taza de leche de coco, azúcar de coco y 1/4 cucharadita de sal en una olla a fuego alto.
2- Cuando hierva, luego baja el fuego, y continúa cocinando y revolviendo constantemente hasta que espese un poco y se vuelva de color más oscuro. Esto toma aproximadamente unos 12 minutos.
3- Retira la olla del fuego y batí la harina de maíz hasta que quede suave, asegurándote de que no queden grumos. Batí la 1/2 taza restante de leche de coco, leche de almendras y extracto de vainilla y colocá la olla a fuego medio.
4- La crema comenzará a formarse primero en la parte inferior, cuando notes que esto sucede, revolve para asegurarte de que la crema se mantenga suave. Cuando comience a espesarse, baja el fuego. Aún revolviendo regularmente, seguí cocinando hasta que tenga una consistencia espesa de crema pastelera, por alrededor de 5 minutos.
5- Sácala del fuego y golpea un poco la olla por debajo contra un trapo para evitar las burbujas de aire y volcá la crema en un bowl grande o en varios chiquitos.
6- Deja reposar hasta que se haya enfriado ligeramente, y luego lleva a la heladera por 3 horas.
7- Antes de servir podes hacer un poco de caramelo y ponerlo encima de la cremita.
8- ¡Y a disfrutar!
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